
La fiesta de los Oscar más grande organizada por la revista Vanity Fair atrajo a un número increíble de invitados famosos y se prolongó durante horas. No sin los ganadores de los premios cinematográficos. Lupita Nyong'o, quien recibió su primera estatuilla de oro por su papel secundario, cambió el vestido azul de Prada, reconocido como uno de los mejores en la última ceremonia, por otra creación de Miucci Prada. Apareció frente a los fotógrafos con un vestido blanco ajustado de Miu Miu, decorado con hilos de corneta verde. Lo emparejaron con zapatos blancos de punta abierta de Prada.
Nyong'o lució el mismo peinado con un fino borde dorado que en la alfombra roja de los Oscar. El maquillaje de la estrella ha sufrido algunos cambios: se aplicó el lápiz labial de un tono rojo anaranjado más intenso a los labios de la actriz.
